Evitar paros no programados en hornos rotativos.
En muchas industrias se usan hornos rotativos para provocar reacciones químicas o simplemente para el secado del material en cuestión. Las altas temperaturas de este proceso requieren normalmente la aplicación de crisoles en el interior del horno. Por cuestiones de abrasión, picos de temperatura, deformación o hasta por el taponamiento del horno este proceso puede sufrir daños.
El objetivo es:
Solución
Control de temperatura en continuo a lo largo del horno
El control de temperatura superficial del horno rotativo mediante este sistema termográfico es muy eficiente. Controla y memoriza las temperaturas de todos los puntos del horno de forma continua. La detección de hot-spots por problemas de grietas en el refractario son fácilmente detectables. Aparte el sistema ofrece un control de los giros para detectar también problemas con chumaceras por falta de lubricación.
Los famosos blindspot ya se pueden detectar para eliminar estos puntos de posibles sobrecalentamientos también.
Aparte, para mejorar el control de calidad, el sistema permite guardar todos los datos para comprobar los parámetros de proceso de producción.